16/12/10

Las (extrañas) puertas (de la percepción)

Ma., G., A. y servidora disfrutamos muchísimo del "documental sobre The Doors", When You’re Strange, anteayer: todos le hemos cascado un nueve en nuestro archivo particular. Quizá fuera por motivos extra-fílmicos como el poder de cautivar que tiene lo gratis o las post-risas que nos echamos al calor de las cervezas y los tacos, pero el documental también nos dio buenas razones.


When You’re Strange descubre un buen puñado de datos, que van desde la anécdota hasta el hito histórico, a una ignorante musical y general como yo.

El ejercicio de documentación es pasmoso: Tom DiCillo da tanto sentido expresivo y narrativo al material de archivo, que hace sospechar que incluye recreaciones ad hoc. El caso cerrado de la road movie inédita todavía me anonada: no puede ser un vehículo más perfecto y natural para la ordenación de seis años (1965-1971) de grabaciones inconexas.

El resultado está lejos de ser una hagiografía sobre Jim Morrison, como he leído por ahí, porque el mito queda retratado como un tipo raro, atractivo y atormentado, estúpido y genial al tiempo, cuyo carisma puede ser dudoso, pero su legado es incuestionable. Igual que resulta obvio que When You’re Strange está más cerca de ser un documental sobre Jim Morrison que sobre The Doors. Pero "¿qué es The Doors sin Jim Morrison?".

2 comentarios:

A. dijo...

8,5 clarísimo.

Pero el plan, de 10.

I. dijo...

Qué bien resumes. Y yo dando explicaciones.